Las ferias han contribuido de forma notable a dinamizar la estructura empresarial y crear nuevas oportunidades de negocio a lo largo de la historia reciente de la economía canaria. Desde 1989, año en el que se constituye formalmente la Institución Ferial de Tenerife, el comercio canario se ha ido multiplicando y especializando de manera considerable.
La política de programación de certámenes marcada por la Institución Ferial de Tenerife se ha amoldado a la nueva realidad canaria, hasta el punto de que podríamos afirmar que casi todo producto o servicio comercializado en Canarias cuenta con alguna feria. Alimentación, construcción, nuevas tecnologías, automoción o enseñanza son algunos ejemplos significativos. Por ello, la tendencia ha sido la de incorporar con la debida programación nuevos certámenes que atienden la demanda de esa continua especialización y diversificación. Las ferias desarrolladas en Canarias, entendidas como un mecanismo que permite establecer una interacción directa entre comprador y vendedor, se han convertido en un motor indispensable de la actividad económica y comercial de la comunidad autónoma canaria.
En el caso tinerfeño –a semejanza, seguro, de lo que ocurre en el caso grancanario-, los certámenes celebrados en el Centro Internacional de Ferias y Congresos de Tenerife contribuyen, indudablemente, al desarrollo económico de las empresas que operan en nuestra región. La feria como herramienta, entendida como acción de mercadotecnia directa, constituye de por sí un valioso instrumento para potenciar no sólo a los sectores que intervienen directamente en la actividad ferial, sino también para otros que de forma indirecta se benefician de ella, como la hostelería o el sector transportes. La eficacia de las ferias comerciales es incontestable, tanto que, a nivel nacional, se colocan en segundo lugar en el ranking, sólo detrás de la venta directa, en lo que se refiere a su influencia en el proceso de ventas.
En nuestra provincia, poner a disposición de los diferentes sectores empresariales la opción de participar en un escaparate en el que acelerar procesos de venta, ganar cuota de mercado, afianzar imagen y/o marca… constituye una motivación permanente para la institución ferial. Ya no sólo como efecto multiplicador de la economía, sino también como mecanismo impulsor de la vida cultural y social de la Isla. A nadie se le escapa la importancia social que han adquirido determinadas ferias, convirtiéndose en claros referentes para la sociedad canaria. Y dentro de los ocho certámenes feriales que se celebran en el Centro Internacional de Ferias y Congresos de Tenerife, el conocido como Recinto Ferial, es obligado destacar Exposaldo.
La espectacular acogida que tuvo el certamen en su primera edición, tanto en lo que respecta a los resultados obtenidos por los expositores presentes, como a la magnífica respuesta de los visitantes, nos convencieron de la necesidad de desarrollar el certamen anualmente y con una ocupación de superficie que triplicaba la inicial. El certamen se celebró en la Gran Nave del Centro Internacional de Ferias y Congresos y fue de nuevo un éxito. La oportunidad para todos los empresarios de liquidar mercancías ante más de 30.000 potenciales compradores constituye sin duda una fórmula atractiva y eficiente que nos lleva a incluir anualmente en nuestra programación la celebración de esta feria, la única que tiene carácter anual.
Asimismo, la Feria de la Alimentación de Canarias registró en el mes de octubre un fuerte impulso hacia la profesionalización del certamen. Con la aparición de las grandes superficies en nuestro territorio, la feria en cuestión ha tenido que adaptarse para ofrecer un producto mucho más profesional a los expositores. Por otra parte, Construye, la feria dedicada a la construcción, volvió a mostrar su importancia y su más que definitiva consolidación dentro del programa ferial de Tenerife. Para el presente ejercicio de 2005, y en un constante afán de adaptarse a la realidad de la economía canaria, la Institución Ferial de Tenerife ha tomado la decisión de reorientar la feria dedicada a las nuevas tecnologías. Una vez convertido internet en el gran escaparate de la informática y de las nuevas tecnologías, la feria que este año se presentará es la Feria del Negocio, un certamen orientado a convertirse en la plataforma ideal para presentar todas las soluciones empresariales que cualquier negocio pueda demandar. El abanico se extiende con amplitud, abarcando cualquier tipo de solución: informática, seguros, asesorías, rotulaciones, mobiliario de oficina, telefonía, y un largo etcétera.
Asimismo, y como claro valor añadido, la feria dedicada al mundo del mobiliario y la decoración, Hogar Canarias, se ve completada con el salón inmobiliario en el que el sector en cuestión presentará sus servicios. Atendiendo a las demandas de los expositores presentes en anteriores ediciones, el certamen cambia de fecha y se celebrará en el mes de octubre. Por último, se celebrará una vez más el Salón del Automóvil de Canarias, un evento que ha adquirido una relevancia social de gran calado y que, edición tras edición, ha sido un éxito de público constatado. En todo caso, cualquiera de estas actividades feriales tendrá un efecto económico multiplicador del que se beneficiarán las empresas y ciudadanos canarios. Y serán ellos, con su respuesta, quienes nos marquen el camino a seguir.