El reto del Espacio Europeo de Educación Superior

Hace algunos años que se habla de la adaptación de los estudios universitarios al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) y, desde entonces, distintos gabinetes ministeriales (del ámbito de la Educación, sobre todo) y las universidades, en comisiones constituidas por los decanos de las distintas titulaciones, hemos trabajado en este proceso de convergencia para alcanzar los objetivos de la Declaración de Bolonia.

El fin último que se persigue con esta convergencia es lograr una Universidad más competitiva y de calidad, al tiempo que facilitaría el intercambio de estudiantes y profesores con el consiguiente enriquecimiento que las relaciones interuniversitarias pueden proporcionar. Sucesivos documentos legales han ido preparando el terreno para afrontar los cambios que se avecinan sin grandes traumas. Las propias universidades se han adelantado a experimentar, con la supervisión de expertos, algunos de los aspectos novedosos en este nuevo panorama académico.

El más notable, sin duda, es el de la incorporación del crédito ECTS (Sistema Europeo de Transferencia de Créditos) como nueva unidad de medida del haber académico que representa la cantidad de trabajo del estudiante para cumplir los objetivos del programa de estudios de las diversas enseñanzas. Este nuevo crédito universitario, que equivaldrá a unas veinticinco horas de trabajo (podría llegar a treinta), valora las enseñanzas teóricas y prácticas, las actividades académicas dirigidas y el trabajo que debe realizar el estudiante para alcanzar los objetivos formativos, como horas de estudio y tiempo dedicado a la realización de exámenes y otras pruebas de evaluación (el actual crédito universitario sólo considera la docencia: 1 crédito = 10 horas de clase).

El recién aprobado Real Decreto 1393/2007, de 29 de octubre, establece por fin la ordenación de las enseñanzas universitarias oficiales de Grado, Máster y Doctorado, con la novedad de proponer que sean las propias universidades las que determinen qué enseñanzas y títulos habrán de impartir y expedir sin necesidad de someterse, como hasta ahora, a las limitaciones de un catálogo establecido previamente por el Gobierno. Habrá, por supuesto, unos mecanismos de control, autonómicos y estatales, que garantizarán la calidad de los estudios y los requisitos para que éstos puedan tener superior reconocimiento y mantener su vigencia una vez transcurrido cierto tiempo (seis años) desde su inscripción en el Registro de Universidades, Centros y Títulos del Ministerio de Educación (RUCT).

El momento en que nos encontramos constituye para la Universidad de La Laguna una extraordinaria oportunidad para ampliar la oferta de estudios en Ciencias de la Información (añadir a Periodismo los de Comunicación Audiovisual y Publicidad y Relaciones Públicas), como es demanda constatada de muchos estudiantes de nuestra Comunidad Autónoma y de diferentes sectores sociales y profesionales. Una vez implantados, estos estudios se ofrecerán desde el primer curso, sin necesidad de realizar un primer ciclo previo.

Primeros objetivos cumplidos

Es preciso recordar que la vigente oferta de nuestra Universidad se limita a un único título de Licenciado en Ciencias de la Información (Rama de Periodismo), como estudios de segundo ciclo, con un exhaustivo plan de estudios, que obedecía a una demanda muy concreta de una etapa cuyos objetivos se han visto cumplidos una vez que gran parte de los profesionales en ejercicio tuvieron la oportunidad de acceder y culminar estos estudios, que cada vez se presentan más necesarios para el ejercicio de la profesión como garantía de la óptima formación de quienes desempeñan la elevada misión de hacer realidad un derecho constitucional, el de recibir información veraz, cada día más demandado y con mayor nivel de exigencia por la ciudadanía.

Contamos ya con un extenso y detallado estudio sobre la demanda social y las competencias que deberán poseer los futuros titulados, información que está contenida en el llamado Libro Blanco de los Estudios de Comunicación; y contaremos, además, con las aportaciones de otros miembros de la comunidad universitaria y, por supuesto, con profesionales y representantes de entidades sociales vinculadas a la comunicación, a quienes desde ahora solicitamos su colaboración.

Confiamos en poder contar con el apoyo institucional para afrontar este proyecto tan deseado como necesario. Necesitaremos más medios, personales y técnicos, téngase en cuenta el elevado carácter práctico de estos estudios que precisan de unas instalaciones acordes a las necesidades formativas de los futuros profesionales de la comunicación de nuestra Comunidad. El resto de Facultades de Comunicación de nuestro país, muchas de ellas más jóvenes que la nuestra, cuenta ya con todos los títulos mencionados y con los medios técnicos (estudios de radio y televisión, salas de audiovisuales y nuevas tecnologías) que nosotros no poseemos, aunque hemos solicitado reiteradamente. Con los nuevos títulos y con los medios correspondientes no sólo contribuiremos a la mejor formación de los profesionales que nuestra sociedad demanda, sino que evitaremos la injusta situación en la que se encuentran muchas familias canarias al verse obligadas a tener que enviar a sus hijos a universidades peninsulares por carecer de unos estudios que hace tiempo debieron estar implantados.

La nueva ordenación

Con la nueva ordenación prevista en el recién aprobado Real Decreto 1393/2007, de 29 de octubre, los estudios de Ciencias de la Información -que presumiblemente mantendrán los tres títulos mencionados de Periodismo, Comunicación Audiovisual y Publicidad y Relaciones Públicas- se ofrecerán como títulos de Grado, que son los que tienen como finalidad proporcionar una formación general orientada a la preparación de actividades de carácter profesional (existirá también la posibilidad de impartir enseñanzas más especializadas de Máster y Doctorado). Se estructurarán en cuatro cursos (cada curso comprenderá un conjunto de asignaturas que en total sumarán 60 créditos; 240 créditos, pues, habrá de cursar el estudiante para alcanzar el título de Grado correspondiente). En el cuarto curso, el alumno elaborará un trabajo de fin de Grado y, probablemente, realice un período de prácticas externas tuteladas. Se habrá observado que he estado utilizando formas verbales de futuro, hecho que obedece a que el plan de estudios no está concluido aún (ninguno lo está), pues será el resultado del trabajo de una serie de comisiones que, a tenor de las instrucciones generales del Ministerio y de las propias que dicte la Universidad, elaborarán el diseño marco con la justificación de la titulación (o titulaciones), las competencias profesionales y las materias formativas que lo integren. El anteproyecto de plan habrá de someterse finalmente a la consideración de las diversas instancias previstas en la Ley.

Facebook
Twitter
LinkedIn
COrreo-e
Imprimir

Patrocinadores

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad