El Norte de Gran Canaria ve cada vez más cerca el final del túnel. Al menos, si hablamos exclusivamente de carreteras, uno de los grandes problemas que ha frenado el desarrollo económico de la comarca en la última década, o de proyectos innovadores. En cambio, sigue vigente el resto de carencias que han dejado sumidos a estos municipios en la cola del progreso de las Islas. Sobre todo, si se abordan las cifras de parados y la diversificación de las fuentes de riqueza.
El 14 de diciembre de 2009 pasará a la historia de los municipios del Norte de Gran Canaria. El mayor embudo del tráfico de toda la Isla (por el que circulan a diario unos 60.000 vehículos) pasó a convertirse en un recuerdo del pasado. Cinco años y medio después de que se solicitara oficialmente la ampliación de la carrera de la costa de Gran Canaria y dos desde que se adjudicaran los trabajos, los operarios retiraban las señales de obras y abrían un tramo de tres kilómetros y medio que discurre entre el enlace de Arucas y la rotonda de Bañaderos, que ha traído a malvivir a los vecinos de la zona. La obra, en la que se invirtieron 21 millones de euros, acabó con las kilométricas caravanas de tráfico que se montaban en la entrada y salida a la capital. La otra asignatura pendiente es la última fase de la Circunvalación, que une, por la zona alta, Arucas con la capital y que rematará el nuevo trazado viario de conexiones con la comarca. Así, como la duplicación del tramo de Moya y Guía, que el Gobierno de Canarias confía en concluir en el verano de 2011.
Mientras las comunicaciones avanzan a distinto ritmo, el paro sigue cebándose con la comarca, donde se han alcanzado cifras nunca conocidas. En la última década el desempleo creció un 250%, hasta alcanzar a comienzos de 2010 los 16.174 afectados (cerca del 13% del conjunto de su población). Incluso, se da el caso de que hay localidades donde se ha llegado a triplicar en ese citado periodo. Una de las más innovadoras iniciativas en la comarca Norte durante el último año es el proyecto desarrollado por el municipio de Valleseco para sacar rentabilidad a sus cultivos de manzanas. Después de dos años de trabajo para crear el marco adecuado de producción y la puesta en marcha de un lagar, la localidad prevé ya embotellar antes de 2011 unas 6.000 botellas de sidra bajo la marca Gran Valle (denominación que surge de la unión de los nombres de Gran Canaria y Valleseco).
“La finalidad es crear puestos de trabajo y recuperar el sector primario”, ha defendido en todo momento el alcalde, Dámaso Arencibia, que aspira a conseguir en menos de cuatro años que estén en producción unos 22.000 manzanos (actualmente cuenta con 9.000 manzanos y se han plantado en los últimos meses otros 8.000 frutales). Si se cumplen las previsiones, el municipio podrá recoger entonces unos 700.000 kilos que se destinarán tanto a la elaboración de la sidra, como también a la de vinagre y de licores, así como a la repostería y mermeladas. Para ello, Valleseco ha pedido la colaboración de la Fundación Universitaria de Las Palmas de Gran Canaria para crear diferentes recetas. Incluso, los alumnos discapacitados del centro ocupacional llevan un año haciendo tartas de manzana.
Moya: guerra al plástico
Dentro de los planes relevantes acontecidos en el Norte, Moya ha emprendido el reto de ser el primer pueblo de España sin bolsas de plástico. El plan, que cuenta con el apoyo de la Dirección General de Consumo del Gobierno de Canarias y la Obra Social de la Caja de Canarias, comenzará su labor transmitiendo a los jóvenes nuevos hábitos de respeto al medio ambiente, teniendo como esencia la erradicación de las bolsas de plástico, un elemento más de una apuesta global por la sostenibilidad de un territorio que tiene en su medio natural el mayor de los reclamos. No en vano, algo más de tres cuartas partes del municipio norteño es zona protegida. Más lento caminan los proyectos ligados al llamado Plan de Competitividad del Norte (2005-2012), en el que se contempla desde hace años los proyectos estratégicos para colocar a los municipios de Agaete, Gáldar, Moya, Guía, Arucas, Firgas, La Aldea, Valleseco, Teror y Artenara en la senda del crecimiento económico y social.
En diciembre de 2009, el rector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, José Regidor; el alcalde de Gáldar, Teodoro Sosa; y el entonces vicepresidente de la Mancomunidad de Ayuntamientos del Norte, Tomás Pérez, presentaban el proyecto del Parque Científico y Tecnológico que se ubicará en este municipio y que estará destinado a la puesta en marcha de proyectos ligados a las energías renovables y materiales sostenibles. El proyecto del parque es una de las acciones contempladas en el Plan de Competitividad de la comarca norte, impulsado por el Gobierno de Canarias. El centro tecnológico estará ubicado en una parcela de terreno de 400.000 metros cuadrados en la zona de Botija, en el municipio de Gáldar, cedido por el Ayuntamiento a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.
El coste total del parque científico y tecnológico está cifrado en 70 millones de euros y se espera que esté en funcionamiento a principios de 2011.El complejo de investigación estará sustentado en un anillo energético aprovechando los recursos solares y eólicos de la zona. En torno a ese anillo se construirán los edificios siguiendo la nueva arquitectura sostenible. En los edificios se ubicarán laboratorios, zonas de investigación y un vivero de empresas. Además, el proyecto del parque contempla la instalación de aerogeneradores y placas solares y depósitos para el almacenamiento de la energía que se produzca, y zonas verdes.
Por otro lado, el mercado agrícola comarcal que proyecta en Guía comienza a ser una realidad, después de que el Gobierno Central haya aportado unos 300.000 euros para la ejecución de la segunda fase de la obra. La instalación, que contará con un centenar de puestos de venta, permitirá dar salida a los productos agrícolas de la comarca. Además, dispondrá de un restaurante con terraza-mirador, locales comerciales y una sala para la celebración de exposiciones, conferencias y cursos temáticos, entre otros servicios. El mercado agrícola, que se denominará Cuatro Caminos, tendrá un coste aproximado de 4,5 millones de euros. Ahora mismo hay consignados algo más de tres millones de euros para esta obra de los cuales dos millones de euros proceden del Plan Especial del Norte del Cabildo Insular y un millón de euros llega desde el Plan de Desarrollo del Norte del Gobierno de Canarias, además de otras partidas adicionales.
En este listado de inauguraciones relevantes, Guía abrió en enero de 2009 la Casa del Queso, un proyecto que pretende servir de revulsivo para los ganaderos de la zona, después de que el producto recibiese el pasado año la Denominación de Origen Protegida tras una década en tramitación. Este es el primer certificado que recibe Gran Canaria en materia de quesos. Pero, a pesar de la demora justificada por problemas técnicos, lo cierto es que sigue estando clausurada un año después… aunque el Ayuntamiento dice que se abrirá antes del verano de 2010.