Después de un año como comisionado del Régimen Económico y Fiscal (REF) de Canarias, me siento satisfecho del trabajo realizado e ilusionado con la importante misión que tenemos por delante: lograr que nuestro fuero sea más social, haciendo que sus incentivos beneficien directamente a las familias, y, a la vez, sea flexible para adaptarse para un futuro más verde, más azul y basado en el conocimiento.
La creación de nuestro departamento en esta legislatura ha marcado un hito en sí mismo, ya que el fuero isleño, a pesar de sus cinco siglos de historia, nunca había tenido un representante con rango de consejero del Ejecutivo, como sucede ahora, a pesar de ser uno de los pilares del desarrollo económico y social de Canarias.
El carácter transversal del REF otorga a nuestro órgano un rol estratégico en proyectos que abarcan desde mejora de las rentas de trabajadores y autónomos, el acceso a la vivienda y la descarbonización de las islas, hasta el impulso de la economía circular y la actividad marítima, así como la adaptación de Canarias a la homogeneización fiscal impulsada por la OCDE.
El REF está profundamente integrado en nuestra vida diaria. Influye en los precios de la cesta de la compra, todos los sectores económicos y los servicios públicos que recibimos. Su profunda imbricación en nuestra realidad hace imprescindible vigilar su aplicación, medir su impacto real y defender activamente su cumplimiento en instancias nacionales y europeas.
Estas son las tareas encomendadas a este nuevo departamento, con el objetivo de hacer que el fuero siga acercándonos al territorio continental y permita que compitamos en igualdad de condiciones.
Otra de mis prioridades es hacer que la ciudadanía conozca nuestro régimen especial. Hasta que no tomemos conciencia de que es tan nuestro como el acento y lo valoremos como un derecho histórico sin el cual la Canarias que conocemos no existiría, el fuero isleño seguirá siendo vulnerable a decisiones arbitrarias contrarias a la equidad que merecemos.
Para difundirlo, hemos puesto en marcha un proyecto pionero de enseñanza junto con las consejerías de Educación y Universidades. Con esta iniciativa, los alumnos del archipiélago aprenderán, desde infantil hasta la universidad, la historia y los principios de nuestra fiscalidad diferenciada.
En paralelo, cerramos un acuerdo con ECCA.edu, heredera de la legendaria Radio ECCA, que nos permite acercarnos a la población adulta con un curso online gratuito. Además, en los próximos meses esperamos lanzar el primer plan de formación sobre el REF destinado a personas trabajadoras y autónomas, en el que expertos colegiado expondrán las medidas de las que pueden beneficiarse para impulsar su actividad.
El seguimiento del REF me ha llevado durante este primer año a colaborar con distintas consejerías para resolver diversas controversias con el Gobierno central. Una de las más sonadas fue la generada cuando el IDAE, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, bloqueó ayudas por más de 80 millones de euros para la instalación de renovables en las islas, al declarar su incompatibilidad con el fuero. Tras semanas de negociación, el ministerio dio luz verde al sector.
También impulsamos las alegaciones del Gobierno de Canarias al Anteproyecto de Ley para establecer una tributación mínima del 15% para las empresas que facturen más de 700 millones de euros. Esta armonización tributaria, para la que el Ministerio de Hacienda afirma que no habrá excepciones para Canarias, deja sin efecto los incentivos fiscales establecidos en el REF para compensar los sobrecostes de operar en las islas. La norma continúa en trámite en las Cortes Generales.
Además, colaboramos en la redacción de una Proposición No de Ley (PNL) que se llevó al Congreso para solicitar la actualización del Registro Especial de Buques y Empresas Navieras (Rebeca), incluido en el REF, para volver a ser un destino preferente para los armadores que hoy optan por banderas de conveniencia y registros de otros países de nuestro entorno.
Otro aspecto en el que nuestro régimen es determinante es la economía circular. Por ello, nos integramos en una mesa de trabajo junto a la patronal y la Consejería de Transición Ecológica para desarrollar el artículo 14 de la Ley 8/2018 del REF, referido al impulso de industrias dedicadas al tratamiento de residuos y reciclaje.
Al mismo tiempo, estamos volcando nuestro máximo esfuerzo en la actualización y modernización de nuestro régimen, con el fin de responder a los grandes desafíos del archipiélago. En este sentido, y con la ayuda de un panel de especialistas, hemos definido un conjunto de propuestas basadas en el espíritu primario de nuestro fuero, para que nos otorgue un trato diferenciado por vivir, trabajar e invertir en las islas, que nos permita igualar nuestros niveles de bienestar con los del resto del país.
Así, hemos presentado en el Parlamento regional una propuesta de un nuevo incentivo en el IRPF para trabajadores y autónomos, –como ya sucede en La Palma–, para mejorar las rentas medias de los hogares canarios. También queremos fomentar la contratación de colectivos de difícil inserción, potenciar la demanda de productos de proximidad, promover la capitalización de las pymes locales, atraer empresas innovadoras, aumentar la oferta de vivienda en alquiler y la construcción de VPO, además de dotar a las islas no capitalinas de un diferencial que contrarreste el efecto negativo de la doble insularidad.
Sin duda, el REF es una condición necesaria pero no suficiente para solucionar todos nuestros problemas. No obstante, es la herramienta más poderosa que tenemos para mejorar nuestro presente y construir un futuro de prosperidad para todos.