El día 16 de enero de 2005, Eduardo Naval llegó a Dakar. Era la primera vez que lo lograba. Antes, ya lo había intentado, aunque sin éxito, en dos ocasiones. Montado sobre su KTM, con la ropa cubierta de polvo después de más de 8.500 kilómetros de recorrido por el desierto y la sabana africana, este tinerfeño completaba los últimos metros de una de las pruebas míticas del deporte del motor convirtiéndose, además, en el primer canario que lo lograba sobre una motocicleta.
“Hice los últimos kilómetros en segunda y de pie, disfrutando de la sensación de haber acabado la carrera”, dijo Naval tras cruzar la meta situada en el Lago Rosa. La dura y exitosa aventura de Eduardo Naval fue el primer hecho relevante de un año de éxitos moderados para el deporte canario. Un año en el que las medallas de oro estuvieron más caras que nunca y en el que los deportistas de élite del Archipiélago no llegaron a brillar con toda la intensidad que muchos esperaban. Fue, por ejemplo, el caso del discóbolo tinerfeño Mario Pestano, quien, a pesar de completar una temporada brillante, falló en la cita más importante del año: el Mundial de Helsinki. Pestano llegó al Mundial colocado entre los siete mejores lanzadores del planeta. Sin embargo, en Helsinki no pasó a la mejora y tuvo que conformarse con un discreto undécimo puesto. Luego se recuperó y en las pruebas de la Golden League volvió a mostrar todo su potencial, luchando incluso por las medallas. Por el camino consiguió la medalla de oro en los Juegos del Mediterráneo, donde hizo buenos los pronósticos que lo daban como gran favorito, aunque su mayor hazaña llegó en la cita de Florencia de la Superliga europea, donde se subió al primer escalón del podio.
Los deportes náuticos fueron tal vez los que mayores alegrías reportaron al deporte isleño. Los títulos mundiales de Daida Ruano y Bjorn Dunkerbeck en windsurf volvieron a hacer sonar con fuerza el nombre del Archipiélago en el ámbito internacional, lo mismo que los conseguidos por Iñaki Domínguez con el barco Movistar en el Campeonato del Mundo de Cruceros y el de Joaquín Blanco en el Mundial de la clase Láser 4.7. Michael Rodríguez, Ana Guimarey y Concepción Escatllar, en la modalidad de salvamento acuático, también contribuyeron a engrosar la lista de oros canarios en citas internacionales con el agua como elemento común, algo en lo que también tuvo mucho que ver la brillante actuación de Enhamed Mohamed en el Campeonato del Mundo de natación para ciegos o la de Alejandro Molina en la Copa del Mundo Off shore de motos acuáticas. Gianmarco Cherubino, en los Iberoamericanos de esgrima, o Zebenzui Díaz, en el Mundial de kickboxing, también tuvieron un protagonismo destacado a lo largo de 2005.
Kárate y taekwondo
Y es que, como ya suele ser habitual, las artes marciales coparon buena parte de los éxitos canarios en el mundo. El kárate que se practica en el Archipiélago es de los mejores del planeta y en 2005, año en el que no hubo Mundial (se celebra cada dos años) sino Europeo, los deportistas canarios también se hicieron notar entre los mejores. En esta ocasión, los mayores éxitos no fueron individuales, sino por equipos. David Santana, que en México 2004 se proclamó campeón del mundo de kumite, volvió a colgarse el oro, esta vez como miembro del equipo nacional de kumite en un Campeonato de Europa que tuvo como escenario el pabellón insular Santiago Martín de Tenerife. Y tampoco falló Gloria Casanova, con dos bronces tras un torneo bastante duro. Aunque la gran sorpresa llegó de la mano de Manuel Cedrés, quien se proclamó campeón de Europa como integrante del equipo español de katas tras derrotar en la final al conjunto italiano, el gran favorito a hacerse con el máximo entorchado.
Pero si en karate hubo éxitos relevantes, tampoco se quedaron atrás los taekwondistas canarios. Rosendo Alonso logró la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo y comenzó a escucharse con fuerza el nombre de la palmera Rosana Simón, una deportista que a pesar de su juventud comenzó a brillar en torneos absolutos después de proclamarse campeona de Europa júnior de combate en el peso gallo. Pedro Miranda, Carlos Minguell, Paola Tirados, Fernando León, Carmen Vicente, Asunción Martín, Adelina Taylor, Edgar Carballo, Gabino Dorta… Los nombres de los deportistas isleños que a lo largo de 2005 representaron a Canarias en el mundo fueron muchos e intentar nombrarlos a todos en este pequeño espacio es imposible. Porque, por número, los podios de deportistas canarios en el ámbito internacional superaron los 150. Tal vez esa fuera la mejor noticia.