El nuevo Plan Territorial Especial de ordenación de la actividad turística permitirá a La Palma complementar su economía básicamente agraria con el sector turístico.
Los palmeros medimos el tiempo por lustros y el año 2005 dio final y comienzo a uno de esos periodos. Fue año de Bajada de la Virgen. Las fiestas, aunque esperadas, transcurrieron de una forma vertiginosa, sin que a penas nos diéramos cuenta. Fueron días de reencuentro, en los que palmeros de allende los mares retornan a su tierra para, junto a sus hermanos, participar de unas fiestas que sin duda se han convertido en un referente religioso, cultural y social. Pero sobre todo, entre tanto acto deportivo, musical o cultural, Ella, la Virgen de Las Nieves, fue la protagonista. Su entrada triunfal en Santa Cruz de La Palma, reviviendo esa tradición de más de tres siglos e irradiando una unión infinita con su pueblo, será recordada por todos durante los próximos cinco años.
Más de 40.000 personas fueron las que en su periplo hacia la ciudad acompañaron a Nuestra Señora, arropándola, vitoreándola y cantándole por los caminos reales de La Dehesa y El Planto, para primero ser recibida en el templo de La Encarnación y, después, ya con la solemnidad que se precisa, pasear por las principales calles de Santa Cruz de La Palma para llegar a la que por 21 días sería su casa y el nuevo punto de encuentro de todos los peregrinos, la Iglesia Matriz de El Salvador. Santa Cruz de La Palma lució en esta 66ª edición de las Fiestas Lustrales sus mejores galas, la ciudad se llenó de color y gente que le dio una imagen cosmopolita y multicultural, a la vez que los balcones y ventanas, salvaguardando tradiciones antiguas, estuvieron adornados para celebrar las diferentes fechas.
La fuerza del fervor popular y la complicidad de los palmeros en la salvaguarda de algún que otro secreto general, celosamente guardado, son las características principales que hicieron que en 1965 estas fiestas fueran declaradas de Interés Turístico General, lo que seguirá repercutiendo en el crecimiento de la misma y en que el homenaje a Nuestra Señora de Las Nieves sea más esperado cada lustro. Pero el 2005 dio para mucho más, no sólo para esta importantísima fiesta. Este año fue en el que desde el Cabildo de La Palma le hemos dado el impulso definitivo al Plan Territorial Especial de Ordenación de la actividad turística de la isla de La Palma, que ya ha comenzado una andadura administrativa que le llevará a la aprobación definitiva -que le corresponde al Gobierno de Canarias, previo informe de la Cotmac-, que se producirá próximamente.
Este Plan es un hito importante para la Isla, con el que se da cumplimiento a objetivos marcados por una serie de personas, con responsabilidades políticas, que entendíamos y seguimos convencidos que la Isla debería complementar la economía básicamente agraria con el sector turístico. Concebido como modelo de turismo específico que aportara beneficios difundidos en el territorio y la sociedad, resulta una fórmula de equilibrio insular, potenciando al emprendedor local. Este es un documento técnico que aprovecha las oportunidades que la ley específica 6/2002 ofrece, singularidad que se plasma en la complementariedad de un turismo en núcleo al modo convencional y la posibilidad de actuaciones aisladas en armonía con el medio agrario y natural. Por tanto es un modelo de equilibrio que tiene muy en cuenta los valores culturales y naturales que la isla posee, para que con estos recursos se pueda construir un sistema turístico insular con buena proyección hacia los espacios de demanda.
Se diseñan productos turísticos que dan respuesta a las características de nuestro territorio insular. Por eso se guarda exquisito equilibrio con la carga alojativa de cada una de las cinco zonas en que se divide la isla, al mismo tiempo que el camino hacia un desarrollo sostenible impone la protección del medio, por lo que en el 60% de la isla estará impedido para ubicar actuaciones alojativas. El objetivo de mejora de la oferta incluye no sólo aspectos de calidad material de las instalaciones, sino la mejora del servicio, donde la formación juega un papel decisivo. La creación de equipamientos de ocio y deportivos forma parte de objetivos inmediatos; y lo hace a escala territorial con el sistema de campos de golf y parques marítimos, y a escala local en tratamiento de enclaves costeros o puntos temáticos en relación con la naturaleza. El Plan es flexible, tal como entiendo que debería ser un instrumento de planeamiento: regula lo necesario para que la planificación sea efectiva, pero crea un marco amplio de oportunidades. Es capaz de dar múltiples respuestas, atendiendo a proyectos reales que se comprometan con la filosofía, con el modelo.
El incendio de Garafía
Pero 2005 ha sido un año en el que también hemos sufrido una de las mayores catástrofes naturales de los últimos años. En el mes de septiembre ardían los montes del norte de nuestra Isla, manteniéndonos durante una semana en una lucha constante contra las llamas que afectaron a varios cientos de hectáreas de un paisaje protegido como es la Reserva de Pino Canario de Garafía. Pero toda experiencia tiene su parte positiva: la solidaridad. En el operativo contra incendios, el mayor activado en nuestras islas, no sólo participaron palmeros de todos los municipios, organizados por sus ayuntamientos, sino que también recibimos la ayuda de las demás islas del archipiélago que desplazaron hacia La Palma a numerosos retenes contraincendios. Nunca podré dejar de agradecer esta ayuda. Desde el Cabildo de La Palma hemos continuado mejorando las medidas contraincendio, sobre todo la prevención. El trabajo que se ha hecho en estos últimos años ha sido importante, tal y como se demostró en algunas partes del incendio que fueron controladas rápidamente porque funcionaron bien los sistemas que se habían preparado.
En otros aspectos de la gestión insular que nos atañe al Cabildo de La Palma creo que hemos consolidado políticas que iniciamos en años anteriores. Políticas de infraestructuras, políticas medioambientales, políticas agrarias, y sobre todo, tal y como nos habíamos comprometido, un incremento notable de las políticas sociales, con atención a los más desfavorecidos y a los discapacitados. Yo creo que estamos haciendo un gran trabajo de incorporación a la sociedad, de dotación de infraestructuras y centros ocupacionales, y también de una integración social de esas personas desfavorecidas.
