Las políticas sociales marcan la diferencia de un gobierno socialista como el que preside La Gomera desde hace ya más de una década. Y si por algo se caracteriza la Isla colombina es por su marcado carácter social, pues las políticas sociales la han convertido en un territorio pionero no sólo dentro de Canarias, sino también en el conjunto nacional. El objetivo principal del Cabildo Insular ha sido siempre la mejora de la calidad de vida de los vecinos de la Isla, hacia la que en 2007 se dio un paso más, pues en los Presupuestos Insulares se apostó por una redistribución de los recursos para beneficiar a todos los residentes y consolidar de forma definitiva las políticas sociales.
Son muchas las acciones sociales de la Corporación insular que han empezado a imitar otras instituciones, y entre ellas destaca la relacionada con nuestra apuesta por una enseñanza universal y gratuita, ya que la formación es la mayor garantía para alcanzar la sociedad avanzada a la que todos aspiramos. Han pasado ya diez años desde que el Cabildo puso en marcha la gratuidad de los libros de texto para todos los alumnos de enseñanza obligatoria, que la Institución gomera volvió a aplicar en este ejercicio, y que en 2007 empezó a extenderse al conjunto de la región tras las iniciativas presentadas por el PSOE y el respaldo del Gobierno de Canarias en el Parlamento autonómico. Ésta es, sin embargo, sólo una de nuestras muchas cartas de presentación.
La Gomera siempre ha tenido clara la necesidad de alcanzar una sociedad más justa y equilibrada, de ahí que en la corporación insular nos hayamos planteado impulsar acciones sociales ya consolidadas como la descrita y poner en práctica nuevas iniciativas que beneficien al conjunto de la población, todo ello sin olvidar la mejora de las comunicaciones e infraestructuras necesarias para garantizar el bienestar social. Las políticas de empleo, con las que el Cabildo contribuye a reducir las tasas de paro de la Isla y que en 2007 duplicaron su inversión y número de contratados, o los programas específicos para jóvenes y mayores, no sólo en lo que a residencias y centros de acogida se refiere, sino también en todo lo relacionado con el ocio y el entretenimiento, son otros claros ejemplos de aquello que defendemos.
Además, se incidió en la colaboración con el exterior, con acciones como el envío directo de medicinas a los hogares de los más necesitados en Venezuela o Cuba, entre otros países, pues justo es devolver lo que podamos a aquellos que con sus esfuerzos nos ayudaron en el pasado a superar las etapas difíciles que vivió el Archipiélago. Y mantuvimos también las ayudas con las que se intenta contrarrestar las desventajas del colapsado sistema sanitario canario, como resulta evidente cuando comprobamos que en una sola semana el Cabildo se vio obligado a intervenir para resolver los problemas de hasta siete gomeros que tenían dificultades para acceder a la atención médica que requerían.
La tenacidad y la lucha insular nos permiten hablar de un nuevo hospital insular, en el que se ha trabajado mucho durante todo el año, y que confiemos que en breve contribuya a paliar los graves problemas descritos. A éste centro se suman, además, otras dotaciones de vital importancia que han empezado a materializarse como la canalización de los cauces que atraviesan núcleos de población, para garantizar la seguridad de las personas, o las nuevas vías que mejorarán los desplazamientos y evitarán inconvenientes históricos que sufren los vecinos.
La magnífica acogida que las demandas y las necesidades insulares han encontrado en el gobierno socialista que preside José Luis Rodríguez Zapatero ha sido la clave de muchos de estos avances, entre los que también podemos citar el inicio de los procesos para el cierre del anillo insular o el acondicionamiento de la Travesía de Hermigua, durante años aparcada y por fin incluida en el Convenio de Carreteras Canarias-Estado. Y es que la colaboración con la Comunidad Autónoma merece otra mención.
Pero si hay algo realmente destacable es que en 2007 la tranquilidad, la armonía y las formas tradicionales de vida se han preservado como los valores más destacados de La Gomera, una realidad que ha guiado todas las iniciativas del equipo de Gobierno del Cabildo, donde emprendimos una nueva legislatura cargados de ilusión, esperanzas y renovadas ganas de trabajar por la Isla. La corporación insular ha hecho una clara apuesta por la recuperación de modos de vida vinculados al campo o las labores artesanas, que hemos aprendido de nuestros padres y nuestros abuelos, alternativas que en absoluto están reñidas con el progreso, sino más bien al contrario.
De cara al futuro, el Cabildo promulga un modelo insular que combina tradición y progreso para alcanzar el ansiado bienestar social. En este modelo los representantes públicos elegidos por los ciudadanos tras las elecciones del mes de mayo tenemos un importante papel que desempeñar y en La Gomera podemos afirmar con gran satisfacción que ya hemos empezado a proyectar las líneas maestras de ese futuro. El desarrollo sostenible, del que tanto se oye hablar, hace referencia a la utilización de forma racional de los recursos naturales, cuidando que no sean esquilmados, para que las generaciones del mañana puedan hacer uso de ellos igual que hoy hacemos nosotros; es decir, sin que nuestras prácticas hipotequen el futuro, evitando en todo lo posible desgraciados sucesos como los terribles incendios que sufrimos el pasado verano.
Y algo tenemos que aprender al respecto de nuestros antepasados, pues ellos hicieron posible que La Gomera sea una isla en la que se ha logrado una completa integración entre el uso y disfrute y la conservación de los recursos naturales. En La Gomera el ser humano ha sabido convivir en perfecta simbiosis con el medio natural. Esta es una de las razones por las que podemos afirmar que la Isla es sinónimo de tranquilidad pero, por encima de todo, La Gomera es y ha seguido siendo naturaleza, una naturaleza de la que forman parte nuestras costas y nuestros montes, que debemos cuidar y mantener día a día desde todas las instituciones públicas y también a título individual.
En consecuencia, el Cabildo está promoviendo políticas a favor de la mejora de la sostenibilidad y en este contexto se enmarca el proyecto de implantación de la Carta Europea de Turismo Sostenible, que supone un gran paso en este camino. Además, existe ya en la Isla algún establecimiento certificado como sostenible, que cuenta con la distinción de Biospher Hotel; ha empezado a ser realidad una red insular de hoteles insulares y está en marcha una ruta cultural. Por último, en el mes de noviembre presentamos una ambiciosa iniciativa, que ya cuenta con el respaldo del Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDEA), dependiente del Gobierno nacional, para implantar la generación y uso de energías limpias en la Isla, hasta llegar al autoabastecimiento insular en el horizonte de 2020.
Éste es, sin temor a equivocarnos, el camino que debemos seguir para, sin descuidar los servicios y la atención al ciudadano que siempre nos han caracterizado, cubrir las necesidades económicas, socioculturales, ambientales e institucionales presentes y futuras, logrando así un desarrollo humano integral que garantice la calidad de vida para hoy y mañana.