De 2008 me quedará el recuerdo de ser un año de intenso trabajo en defensa de los intereses, no sólo de los palmeros, sino también de todos los canarios. Fue año de elecciones y tuve la suerte de concurrir en las listas de mi partido a las Cortes, siendo elegido diputado por la provincia de Santa Cruz de Tenerife. Desde este cargo he tenido la oportunidad de interpelar al Gobierno del Estado sobre todos aquellos intereses necesarios para los nuestros. La inmigración, agricultura o las condiciones de la crisis en Canarias, pero especialmente sobre el plátano, principal motor de la economía palmera.
En Madrid hemos conseguido que el plátano sea introducido entre los productos que son objeto de subvención al transporte. La Cámara aprobó por unanimidad una iniciativa histórica en un momento delicado por el que atraviesa este producto, permitiendo que el plátano también pueda acogerse a la subvención al transporte de mercancías con origen y destino en las Islas Canarias, con una compensación de hasta un 50 por ciento. Mientras, en La Palma hemos intentado hacer nuestros deberes. Trabajamos desde hace muchos meses previniendo la situación económica mundial que ahora mismo nos afecta, desarrollando diferentes políticas tendentes a mejorar la cualificación y el acceso a un puesto de trabajo a nuestros ciudadanos.
La Unidad de Empleo y Formación del Cabildo de La Palma propició durante 2008 la mejorar de la formación, así como su mejor acceso a la vida laboral y a un puesto de trabajo, a 1.058 personas. Durante este periodo hemos desarrollado actividades de asesoramiento empresarial, se ha impulsado la emprendeduría, y hemos aportado ayudas económicas y técnicas para la puesta en marcha de actividades dirigidas a los empresarios y profesionales palmeros; hemos colaborado en acciones que fomenten la integración de la mujer en el mundo empresarial, y hemos promovido la formación como herramienta para el desarrollo empresarial.
Este ha sido también el año en el que tras algún tira y afloja se logró la cesión del antiguo Hospital de Las Nieves para la construcción de un centro sociosanitario, no con el mejor acuerdo, ya que teníamos otras opciones más favorables para los palmeros, pero entendemos que es un acuerdo que no se puede dilatar más en el tiempo y, por tanto, lo valoramos como positivo.
Aunque 2008 dio para mucho más. Este año fue en el que desde el Cabildo de La Palma le hemos dado el impulso definitivo al Plan Territorial Especial de Ordenación de la isla de La Palma, que se encuentra en fase de presentación de la Memoria Ambiental para su aprobación inicial, que le corresponde al Gobierno de Canarias. Este Plan es un hito importante para la Isla, con el que se da cumplimiento a objetivos marcados por una serie de personas, con responsabilidades políticas, que entendíamos y seguimos convencidos de que la Isla debería complementar la economía básicamente agraria con el sector turístico. Concebido como modelo de turismo específico que aportara beneficios difundidos en el territorio y la sociedad, una fórmula de equilibrio insular potenciando al emprendedor local.
El Plan es flexible, tal como entiendo que debería ser un instrumento de planeamiento, regula lo necesario para que la planificación sea efectiva, pero crea un marco amplio de oportunidades. Es capaz de dar múltiples respuestas, atendiendo a proyectos reales que se comprometan con la filosofía, con el modelo. En la defensa de ese modelo recobra vital importancia el pueblo palmero, como actor principal en la consecución de esta filosofía, que nos ha llenado de orgullo, entendiendo que el palmero ha sabido conjugar el desarrollo económico con la protección del medio, lo que ahora denominamos desarrollo sostenible, que ha sido el modus vivendi del isleño generación tras generación. Y esta forma de actuar, de conservar, de trabajar, ha sido el impulso final que un edén natural como nuestra Isla necesitaba para que la UNESCO nos reconociera internacionalmente como Reserva Mundial de la Biosfera.
Y por fin, el 2008 sirvió para dar apertura a uno de los recintos culturales más importantes del Archipiélago. El Teatro Circo de Marte abrió por fin sus puertas después de casi cinco lustros de reformas, dando de nuevo una opción cultural a la capital palmera. Ahora todos vemos con muchas expectativas las próximas temporadas culturales, así como la contribución que el Teatro Circo de Marte hará al desarrollo de las cualidades artísticas de los palmeros y palmeras.
En otros aspectos de la gestión insular, que nos atañe al Cabildo de La Palma, creo que hemos consolidado políticas que iniciamos en años anteriores. Políticas de infraestructuras, políticas medioambientales, políticas agrarias, y sobre todo, tal y como nos habíamos comprometido, un incremento notable de las políticas sociales, con atención a los más desfavorecidos y a los discapacitados. Yo creo que estamos haciendo un gran trabajo de incorporación a la sociedad, de dotación de infraestructuras y centros ocupacionales, y también de una integración social de esas personas desfavorecidas.
