Sin duda, el año 2021 permanecerá en el recuerdo de todos. El año en el que un volcán cambió la vida de tantas personas en la isla de La Palma y que también puso a prueba la capacidad de actuación de ciudadanos, empresas e instituciones para arrimar el hombro y estar a la altura de las circunstancias.
Desde CaixaBank quisimos estar muy próximos a los palmeros desde que se inició la erupción del Tajogaite, con la puesta en marcha en tiempo récord de un programa solidario de apoyo a las familias, negocios, empresas y productores agrarios de la Isla para estar al lado de los clientes y de toda la sociedad, y contribuir en la medida de lo posible a que pudieran sobrellevar esta situación.
Hemos estado siempre muy cerca de los palmeros, llevando a cabo nuestra labor como entidad bancaria, pero también respaldando infinidad de proyectos sociales y culturales
Un amplio paquete de medidas extraordinarias que, bajo el lema #CaixaBankConLaPalma, se implementaron a través de nuestra red de oficinas en la Isla con todo el equipo humano de la entidad implicado en su gestión, y a través del que concedimos más de 850 moratorias de pago atendiendo el cien por cien de las solicitudes para aliviar la carga financiera de los afectados.
Estuvimos también cerca del sector agrario, coordinando anticipos y ayudas de urgencia destinados a paliar los daños en fincas y explotaciones agrícolas, y acompañamos a los autónomos y empresas que se vieron afectados por la paralización de la actividad comercial con medidas de apoyo específicas para aliviar su situación.
La tragedia vivida en La Palma por la erupción despertó una ola de solidaridad para ayudar a los afectados que, en muchos casos, lo perdieron todo. Para facilitar la recaudación de estas donaciones, también colaboramos con las instituciones de la Isla habilitando distintos canales ad hoc para esta causa solidaria.
Como primera entidad financiera de Canarias, en CaixaBank trabajamos para maximizar nuestra contribución al progreso económico de las Islas. Además, en nuestro ADN está el compromiso social con las personas que más lo necesitan, mediante la labor que realiza la Fundación “la Caixa”.
Es por ello que además de las medidas de carácter económico que pusimos en marcha a raíz de la erupción volcánica, nos implicamos con el apoyo a la Isla a través de medidas de calado social, destinando cerca de 200.000 euros a la cobertura de las necesidades más inmediatas de los damnificados, junto a la convocatoria de un programa de ayudas para que el alumnado que cursa estudios fuera de la isla pueda continuar con su formación.
También en el ámbito escolar implementamos un programa de resiliencia y prevención postraumática para los niños y familias de La Palma, una herramienta con la que ayudar a los menores, a las familias y al profesorado a sobreponerse a esta situación y a resolver todas las inquietudes y sentimientos que genera una catástrofe como la que ha sufrido la Isla.
Nuestra entidad cuenta con un arraigo histórico en La Palma ligado a los orígenes de la Caja de Ahorros Insular, cuyo negocio se integró en CaixaBank tras distintos procesos de fusión bancaria. Hemos estado siempre muy cerca de los palmeros, llevando a cabo nuestra labor como entidad bancaria, pero también respaldando infinidad de proyectos sociales y culturales, valiéndonos de nuestra capilaridad para detectar a través de nuestras oficinas los proyectos que llevan a cabo las entidades sin ánimo de lucro con los colectivos más vulnerables de nuestra sociedad, para contribuir al progreso social haciéndolos realidad.
Vivir una catástrofe como la que ha sufrido La Palma exige que no nos olvidemos de su reconstrucción. Que con el mismo tesón con el que nos implicamos para apoyar a la Isla durante los 85 días que duró la erupción, sigamos trabajando de forma colaborativa para seguir implementando medidas de apoyo que sirvan de estímulo a la recuperación económica de la Isla, y que ayuden a aliviar la situación que afrontan las familias y negocios que tienen que emprender una nueva etapa postvolcán en sus vidas y proyectos.
Vivimos tiempos de gran complejidad, tiempos de cambios y de crisis. Esto tiene sus inconvenientes y sus incomodidades, pero estos tiempos son también origen de grandes oportunidades. Porque solo en los entornos de cambio se abren nuevos caminos y en este tránsito puedo asegurar que los palmeros y palmeras van a contar con el apoyo de CaixaBank.
Solos llegamos más rápido pero juntos llegamos más lejos. Con la acción de todos y la suma de voluntades podemos contribuir a generar esas nuevas oportunidades para la Isla, tomando como ejemplo otros pueblos que habiendo sufrido una erupción volcánica han conseguido salir adelante. La Palma tiene un enorme potencial como territorio y ahora más que nunca se hace necesario sumar voluntades para su recuperación.
Toca involucrarnos y poner sobre la mesa qué podemos aportar desde la colaboración público-privada para su reconstrucción. Con un modelo centrado en las personas, el consenso y la participación activa, que ayude a los palmeros y palmeras a superar esta catástrofe y mirar al futuro con esperanza.Recuperemos juntos La Palma.