En 2005 se ha logrado que el Gobierno de Canarias acepte el índice ETCS (financiación por alumno en curso completo) y que este índice sea igual para calcular la financiación de las dos universidades canarias.
El año 2005 ha sido muy importante para la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) por dos hechos que pueden marcar un antes y un después en sus proyectos y desarrollo futuro: hemos logrado superar el déficit presupuestario de la institución y el Gobierno de Canarias ha aceptado una vieja solicitud marcada en el deseo de lograr la convergencia presupuestaria de las universidades canarias.
En seis años, desde que en 1999 el equipo de gobierno que encabezo valorara en casi 15 millones de euros la deuda de la institución, esta Universidad puede presentarse ante la sociedad con una economía saneada. Pero no hay que confundir los términos, porque esto no es sinónimo de que sea una economía suficiente, ya que aún poseemos carencias en equipamiento y tecnologías que hay que cubrir para mantener los estándares alcanzados. El logro de esta economía saneada se debe a una ejecución responsable de los presupuestos por parte de todas las unidades de gasto de la Universidad (Centros, Departamentos, Edificios…), unida a unas previsiones de ingreso ajustadas. Además, nos va a permitir no tener que destinar recursos a cubrir déficit, que podrán ser liberados para las muchas necesidades que hay que atender con un presupuesto limitado y así continuar en la línea de racionalidad y control del gasto presupuestario.
El segundo hecho se refiere a una vieja aspiración de la ULPGC planteada de forma continua a los responsables del Gobierno de Canarias: lograr la convergencia presupuestaria de las universidades canarias. En 2005 se ha logrado que el Gobierno de Canarias acepte el índice ETCS (financiación por alumno en curso completo) y que este índice sea igual para calcular la financiación de las dos universidades canarias. De esta forma entendemos que se ha establecido un modelo de financiación ecuánime y motivador para el sistema universitario canario, basado en la aplicación de criterios racionales y objetivos, a la vez que pueden incorporarse los estímulos financieros necesarios para recompensar adecuadamente la búsqueda de la calidad y la eficiencia en la prestación de los servicios académicos por parte de las universidades. Este logro de convergencia financiera elimina el diferencial que, en términos relativos al tamaño de las universidades, existía hasta los presupuestos de este año en la asignación de recursos públicos.
Como he dicho al principio, esto puede marcar un antes y un después en el desarrollo de los proyectos que la ULPGC tiene previstos, y ya en marcha, en beneficio de los canarios y la sociedad canaria. Porque esta Universidad ha hecho una apuesta clara y rotunda por la calidad y por las nuevas tecnologías. Una calidad que viene avalada por los informes cíclicos a los que nos sometemos a solicitud propia, tanto en evaluaciones nacionales como europeas, lo que nos ha hecho aparecer entre las quince primeras universidades del Estado en un documento elaborado por profesionales de las universidades de Pennsylvania y Barcelona.
El uso y desarrollo de las nuevas tecnologías es una marca de identidad de la casa, ya que consideramos que una Universidad del siglo XXI no puede marchar de espaldas a una tecnología que está cambiando la faz del conocimiento. Hemos apostado por un campus virtual que ofrece titulaciones oficiales, máster, cursos expertos, cursos de extensión universitaria, doctorado… en suma, una amplía gama de teleformación que consideramos aún más imprescindible en una geografía fragmentada como la canaria, para ofrecer posibilidad de aumentar el conocimiento hasta en el último rincón del Archipiélago.
Esta oferta de teleformación se une a la gran cantidad de servicios y gestiones que la ULPGC ofrece en línea, como la matrícula de alumnos, solicitud de certificados, apuntes en red, tutorías, etc. Estos avances también han sido reconocidos por entidades independientes como la Fundación Auna, que ha situado a la ULPGC en el tercer lugar de todas las universidades españolas en el uso y desarrollo de tecnologías de la información.
Un futuro europeo
En el año 2005 también han empezado a sentarse las bases para la adaptación de las universidades españolas al espacio europeo de educación superior, que va a suponer una gran revolución para nuestros estudiantes ya que su formación tendrá validez en todos los países que conforman la Unión. En este ámbito hay dos grandes temas que deben ser aclarados en los próximos meses: el nuevo mapa de titulaciones universitarias españolas y la reforma de la Ley Orgánica de Universidades. De momento, lo que parece cierto es que las nuevas titulaciones se dividirán en grado y posgrado, que los alumnos trabajarán de forma diferente (más tutorizados y con menos clases tal y como las entendemos hoy en día) y que, probablemente, no se reducirá el número de títulos.
Esta reforma debe y tiene que ir acompañada de un impulso firme por parte de las Universidades a los programas de intercambio de estudiantes Erasmus entre las diferentes universidades europeas, que ya en el año 2002 celebró el estudiante Erasmus un millón. Una tarea que también es fundamental para la ULPGC, que cada año aumenta el número de estudiantes que salen y también los que llegan desde todos los rincones europeos.
El segundo gran tema pendiente que afecta a las universidades españolas es la anunciada reforma de la Ley Orgánica de Universidades que tiene que ser aprobada por el Parlamento español. Aunque aún quedan por concretar los diferentes aspectos, el Ministerio de Educación ha anunciado cambios en la contratación de profesores no funcionarios, una única prueba de acceso a la Universidad y la libertad de éstas para decidir la fórmula de elección del rector.
Por tanto, considero que este año volverá a ser apasionante y rico en proyectos y logros tanto para la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, como para el conjunto de las universidades españolas. No debemos olvidar que en estos centros reside no sólo la tarea fundamental de transmitir ciencia y conocimiento hacia nuestros jóvenes, sino que también son el referente de la investigación, la creación y la innovación que se está desarrollando en el país.