El Servicio Canario de la Salud afronta con determinación el déficit de financiación estatal y las exigencias impuestas por el nuevo marco presupuestario. Canarias lideró en 2010 la contención del gasto farmacéutico y se realizaron 114.000 intervenciones quirúrgicas, un seis por ciento más que el año anterior.
Me tocó llegar a esta Consejería, a finales de octubre pasado, en un momento difícil como consecuencia de la ruptura del pacto de Gobierno por parte del PP. El marco de crisis financiera internacional forzaba al Estado y al conjunto de las comunidades autónomas a realizar una importante reducción del gasto para ahuyentar el fantasma del rescate de nuestra Economía. Por ello, hemos tenido que aprobar uno de los Presupuestos más austeros de nuestra historia para el año 2011 y hemos recibido por ello las críticas de determinados sectores. Este ejercicio de responsabilidad y el cumplimiento de los objetivos de contención del gasto son los que han permitido, no obstante, que el Estado haya autorizado a Canarias a endeudarse por importe de unos 600 millones más en 2011.
La situación era difícil desde hacía algún tiempo, ya que Canarias arrastraba en 2009 un déficit de financiación estatal de 1.423 millones de euros, pues el modelo de financiación sanitaria vigente desde 1999 no contemplaba ni reconocía el aumento de población experimentado desde esa fecha, ni los costes derivados de la insularidad, la doble insularidad y el alejamiento. El reto en estos momentos es mantener la calidad de nuestros servicios y prestaciones básicas y para ello estamos trabajando con determinación. Con un presupuesto de 2.725,4 millones de euros (el 38,28% de los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma), Canarias volvió a ser en 2010 una de las comunidades que realizó mayor esfuerzo presupuestario para suplir el mencionado déficit de financiación, dedicando a la sanidad pública un mayor porcentaje del conjunto de sus Presupuestos.
Para hacer frente a esta situación de déficit de financiación estatal y de enorme esfuerzo presupuestario por parte del Gobierno de Canarias, el Servicio Canario de la Salud ha puesto en marcha un Plan Operativo de control del gasto, un Plan de Actuación de Ahorro Energético que ha permitido reducir la factura en este capítulo en 3,8 millones de euros; la centralización de las compras de suministros, para generar economías de escala; y la modernización de los sistemas de gestión económica y financiara, a través del proyecto Taro, que entre otras mejoras ha permitido incrementar los ingresos propios y la facturación (precios públicos) en algo más del 15%, pasando de facturar 25 millones de euros en 2009 a algo más de 29 el pasado año. Y lo mismo ha ocurrido con la facturación realizada por las asistencias prestadas a ciudadanos asegurados de Estados de la Unión Europea, que se ha incrementado en un 47% respecto al ejercicio anterior, lo cual redundará en un incremento sustancial de lo percibido vía fondo de cohesión por este concepto.
La reducción del gasto en medicamentos del SCS es un clarísimo ejemplo de la efectividad de las medidas de contención y racionalización del gasto público. En 2010, el gasto farmacéutico disminuyó en Canarias un 5,84%, frente al 5,17% de incremento registrado en 2009 y al 9,28% de 2008. Nuestra comunidad fue la que más redujo el gasto por este concepto en 2010 (la media estatal fue del -2,32). Entre las medidas que han hecho posible este ahorro destaca la mejora de la calidad de la prescripción de los médicos del Servicio Canario de la Salud y el aumento de la prescripción por principio activo, que en 2010 subió de un 15% a un 26,4%, sin olvidarnos de la implantación de la Receta Electrónica.
Con respecto a la actividad asistencial generada por el SCS en 2010, hay que destacar el enorme esfuerzo realizado por nuestros profesionales. Así, podemos decir que el pasado año se realizaron más de 114.000 intervenciones quirúrgicas, con un incremento de la actividad de un seis por ciento respecto al año anterior; 15.096 intervenciones con Cirugía Mayor Ambulatoria (sin ingreso), así como más de 8,5 millones de consultas de Medicina de Familia, 3,6 millones de Enfermería y 1,4 millones de Pediatría, en Atención Primaria; además de otros 2,6 millones de consultas atendidas por médicos especialistas. A esta actividad de los centros asistenciales del SCS se suma la realizada por el Servicio de Urgencias Canario (SUC), que en 2010 atendió 321.392 demandas sanitarias, para las que movilizó en 236.014 ocasiones sus recursos humanos y móviles. La media de demandas sanitarias atendidas diariamente por el SUC fue de 893.
La reducción de las listas de espera es y seguirá siendo una de las líneas de actuación estratégicas de la Consejería de Sanidad, y por ello hemos aprobado desde principios de este año más de 108 programas especiales para la realización de intervenciones quirúrgicas, consultas y pruebas diagnósticas en prácticamente todas las especialidades, que han comenzado a dar ya sus frutos. En el conjunto de la legislatura (de octubre de 2007 a noviembre de 2010) la lista de espera quirúrgica se redujo un 9,3%, pero sobre todo hay que destacar el descenso en un 54,45% del número de personas que estaba a la espera de una intervención quirúrgica durante más de seis meses.
La modernización y ampliación de las infraestructuras sanitarias representa, asimismo, uno de los pilares sobre los que se sustenta la mejora de la accesibilidad y la calidad de nuestro servicio sanitario. Sólo en 2010 se invirtieron en obras de construcción, ampliación y remodelación de las infraestructuras sanitarias del SCS del orden de 31.292.363 euros, además de otros 10 millones para la adquisición de tecnología y equipamiento sanitario. Con estos recursos se finalizaron en 2010 un total de doce proyectos de infraestructuras de Atención Primaria.